El componente clave de el S&P 500

El S&P 500: conoce su componente clave

A pesar de las fluctuaciones, que a veces son significativas, como caídas promedio del 50% cada 20 años, el S&P 500 ha tenido un rendimiento anual promedio, con dividendos reinvertidos, de alrededor del 10% desde sus inicios. A modo de información, en noviembre de 2020, los rendimientos, con dividendos reinvertidos, del S&P 500 fueron los siguientes: 10,90% para inversiones de más de 50 años, 11,32% para inversiones de más de 40 años, 10,67% para inversiones de más de 30 años, 6,95% para inversiones de más de 20 años y 13,85% para inversiones de más de 10 años.

 

La clave para su éxito

Ahora, ¿cuál ha sido el componente del S&P 500 de mayor éxito? Históricamente, Philip Morris y sus afiliadas han tenido el mejor desempeño como componente más grande del S&P 500 hasta la fecha. Si hubieras invertido $1,000 en la compañía Philip Morris cuando comenzó el S&P 500 y reinvertido los dividendos, ahora tendrías una fortuna de más de $10,000,000 y serías propietario de magníficas compañías como Mondelez International (LU Biscuits), Kraft Heinz Company, Altria (salsa de tomate) y Philip Morris International (Marlboro).

Este éxito aplastante se debió en gran parte a la reinversión de dividendos. Sin embargo, se pueden llegar a conclusiones similares con el desempeño de empresas como McDonald’s, Coca-Cola, Apple, Microsoft, Google y Amazon, por nombrar algunas.

 

El éxito del SP500

¿Por qué invertir en él?

 

Invertir en el S&P 500 es económico y fácil. La mayoría de los inversores no tienen tiempo ilimitado para considerar diferentes alternativas de inversión, ni los recursos y conocimientos para identificar qué acciones comprar. Por lo tanto, es extremadamente difícil tener éxito invirtiendo en el mercado de valores con acciones individuales. ¿Realmente leerías los informes financieros de las 500 principales empresas de Estados Unidos todos los días para tener una buena idea de qué hacer? Como economista y jubilado, tengo el tiempo y la formación para hacerlo, pero realmente tengo otras cosas que hacer en mi vida. Por eso, para invertir en acciones estadounidenses, un ETF que represente al S&P 500 es la solución ideal. Además, si buscas un poco, encontrarás fondos ETF que cobran solo un 0,1% de comisión anual. No encontrarás una mejor relación calidad-precio. Por lo tanto, el fondo de inversión es sin duda la forma de inversión más conveniente, ya que comprar una parte es como comprar una parte de una cartera ya diversificada. No tienes que gestionarlo tú mismo, los gestores de fondos deciden todo por ti. Además, no hay problema de suministro, ya que puedes elegir entre varios cientos de fondos de inversión en acciones estadounidenses.

Sin embargo, hay una decisión que debes tomar. Es importante elegir bien porque estos fondos difieren en calidad. Basta con comparar sus rendimientos anuales a lo largo de 5 años: solo el 10% de ellos supera al mercado. Esto se explica tradicionalmente de la siguiente manera:

  1. Muchos gestores de fondos intentan superar al mercado al dar más peso a las acciones que consideran prometedoras o limitar el peso, e incluso descartar las acciones que creen que tendrán un rendimiento inferior. Desafortunadamente, toman más decisiones malas que buenas, lo que afecta el rendimiento del fondo.
  2. Algunos fondos tienen tarifas demasiado altas. Mientras que algunos cobran un 3,4% anual, un rastreador que replica el ETF S&P 500 en mi cartera solo tiene un 0,07%. Esto significa que el rendimiento del primero debe ser un 3,3% superior al del segundo para que haya una diferencia positiva. Es un rendimiento que es realmente imposible de lograr a largo plazo. Con este tipo de fondo indexado o ETF, no tendrás sorpresas desagradables.

Los gestores se limitan a replicar la evolución del S&P 500, el índice que incluye las 500 principales acciones estadounidenses.

 


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